¿Qué es Smart Learning?

Andrés Herrera 20 10, 2022

El Smart Learning hace referencia a un término anglosajón que se traduce como “educación inteligente”. Este concepto se relaciona con los nuevos entornos educativos en donde el alumno hace uso de la tecnología actual. No solo de programas informáticos, sino de distintas pantallas que, aplicadas en clase, se transforman en un elemento más.

Fruto de este proceso de enseñanza surge el concepto Smart Learning Methodology (SLM), es decir, una metodología que pretende ayudar a los alumnos a alcanzar el mayor nivel académico gracias al uso de las nuevas tecnologías.

Smart Learning aplicado centros de estudio

El Smart Learning pasa porque los alumnos aprendan un uso responsable de las tecnologías teleformativas para aprovecharlas al máximo para que pueda mejorar en su itinerario formativo. Dadas las ventajas que ofrecen estos dispositivos, y la conectividad a internet (una gran fuente de datos), los estudiantes pueden mejorar sus expectativas académicas.

La inclusión de las nuevas tecnologías en la enseñanza brinda grandes beneficios al alumno en tanto que les permite una mayor conexión a bases de datos para ampliar la enseñanza, una educación rica en recursos (internet habla en lenguaje multimedia) y, al profesorado, le facilita una mayor monitorización de las acciones que realiza el estudiante.

El Smart Learning no debe confundirse a la mera utilización de las nuevas tecnologías en el proceso de aprendizaje (por ejemplo, para buscar una fecha importante en internet), también se centra en el mismo alumno y qué uso está dando a esos dispositivos. Es decir, que al mismo tiempo los estudiantes desarrollan una propia autonomía que le hace saber cuándo debe hacer uso de estos recursos.

Principales características del Smart Learning

El Smart Learning es mucho más que un aprendizaje que hace uso de las nuevas tecnologías para mejorar las posibilidades de los alumnos. Hay una serie de características que ayudan a entender cuál es el sentido de este concepto:

• Favorece la autonomía del alumno: El Smart Learning no pretende hacer que las nuevas tecnologías lo hagan todo por el alumno, sino presentar estos dispositivos como una herramienta más para alcanzar los objetivos académicos.
• Contextualiza el aprendizaje: La enseñanza tradicional se centra en el contenido teórico y, después, su aplicación en un entorno práctico. Pero incluir las nuevas tecnologías en el itinerario formativo permite que los estudiantes puedan contextualizar lo aprendido en un entorno virtual.
• Desarrolla el lenguaje multimedia: Internet habla en lenguaje multimedia, por lo que abrir sus puertas a los alumnos permite que estos aprendan a hablar este idioma rico en recursos.
• Aumenta la capacidad de razonamiento: Los estudiantes tienen ante ellos las herramientas, ¿pero saben cuándo usarlas? ¿Saben dónde buscar? Los alumnos deben descubrir cuáles son los recursos que precisan en el momento que les surge una necesidad.
• Educación más lúdica: Las opciones de las nuevas tecnologías permiten que este aprendizaje pueda ser más lúdico que otros modelos tradicionales.  Un buen ejemplo son los contenidos gamificados a los que puede acceder un estudiante.

¿Cómo transformar entornos educativos con Smart Learning?

El Smart Learning está transformando ya lo centros educativos. Desde pizarras inteligentes hasta ordenadores a los que pueden acceder los alumnos. Todos estos entornos de aprendizaje incorporan los mencionados dispositivos, pero ese no es todo el cambio que podemos advertir.

Los entornos educativos también se transforman en tanto que pueden ofrecer un contexto virtual en donde lo aprendido a nivel práctico pueda ponerse en práctica, ofreciendo un entorno interactivo a través del que los alumnos puedan entender mejor los conceptos que estudian. Una experiencia completa, en definitiva.

Por otro, también hay que pensar en las nuevas tecnologías más allá del centro educativo. Es decir, aquellas que los estudiantes tienen en casa para aprovecharlas y mejorar las labores de tutoría, permitiendo el encuentro entre tutor/docente y estudiantes por las tardes. Herramientas con las que poder ampliar la experiencia más allá del entorno físico.

¿El futuro del aprendizaje será el Smart Learning?

Desde luego que pensar que en un futuro el Smart Learning cambiará el sistema de aprendizaje es un error. En especial porque esta transformación ya puede verse en la actualidad, en multitud de centros de enseñanza, donde las nuevas tecnologías ya tienen un papel muy importante dentro de los itinerarios formativos.

Lo que está por ver es el rumbo que el Smart Learning tomará. Y es que en muchas ocasiones el uso de las nuevas tecnologías no se extiende más allá de la búsqueda de información, o la muestra de un contenido audiovisual para toda la clase. Además, en la actualidad los entornos virtuales de aprendizaje (EVA) siguen desarrollándose, permitiendo una mayor contextualización de lo que se va aprendiendo en clase.

Desde luego que esta tendencia seguirá transformando las aulas al mismo ritmo que las tecnologías mejoran y aumentan sus prestaciones. Lo que está por ver es cómo se asume el reto en las clases y si se puede transmitir las nociones necesarias para que los alumnos hagan el uso que se espera de estos dispositivos.

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